Sábado, 13 de diciembre de 2013. 8,30 horas.

Esta es la fecha de un correo electrónico que me envió mi amigo Gabriel y que he guardado, como él me recomendó. El contenido del mismo es un artículo escrito por Dª. Concha Caballero (Baena, Córdoba, 1956). Licenciada en filología hispánica y profesora de literatura en un instituto público. Firmemente humana con los temas sociales. En el mencionado artículo nos advierte de lo que sucederá “Un buen día del año 2014” “. Ha de esto ya algunos meses y se cumple, con rigor, sus advertencias, que desgranaba minuciosamente. Y no es porque sea una pitonisa, no, sino porque tira del sentido común, que dicen que es el menos común de los sentidos, y lo aplica a la realidad de la política española.

Entre otras cosas, entonces, nos decía:

“ “Un buen día del año 2014, la crisis habrá terminado oficialmente y se nos quedará cara de bobos agradecidos, nos reprocharán nuestra desconfianza, darán por buenas las políticas de ajuste y volverán a dar cuerda al carrusel de la economía. Por supuesto, la crisis ecológica, la crisis del reparto desigual, la crisis de la imposibilidad de crecimiento infinito permanecerá intacta pero esa amenaza nunca ha sido publicada ni difundida y los que de verdad dominan el mundo habrán puesto punto final a esta crisis estafa -mitad realidad, mitad ficción-, cuyo origen es difícil de descifrar pero cuyos objetivos han sido claros y contundentes: hacernos retroceder 30 años en derechos y en salarios” .

Los neoliberales cabalgan sobre “Rocinantes” dentro del recinto prefijado, por ellos mismos, de las macros políticas económicas de “Dulcinea”, mientras nos mantean, cual “Sancho”, haciéndonos comulgar con ruedas de molinos.

A punto de parir la “cerda”, las crías, aún dentro de su vientre, se pelean para salir de las primeras para así asignarse las mejores tetas. Las elecciones europeas están a la vuelta de la esquina y sus candidatos nos venden sus mejores bondades a sabiendas de que las suyas, las tetas, las tienen aseguradas

Lo peor de todo esto es que le damos carta de libertad a estos desalmados y una vez vendidas sus bondades y aseguradas sus tetas, se pasan por el forro de sus cabalgaduras todo lo que nos prometen.

Y Dª Concha Caballero nos continuaba diciendo a la plebe, también entonces que:

“ “Cuando el calendario marque cualquier día del año 2014, pero nuestras vidas hayan retrocedido hasta finales de los años setenta, decretarán el fin de la crisis y escucharemos por la radio las últimas condiciones de nuestra rendición.” “

Una de las condiciones a la que seremos sometidos y que no admite negociación alguna y a la que estaremos necesariamente obligados a aceptar por siempre es a la esclavitud y obediencia al Capital con la promesa de fe a adorarlo y respetarlo como ente superior a todos.

Y…” “un buen día del año 2014“” se anunció elecciones para el Parlamento Europeo, cuando hacía ya un tiempo que estábamos en los umbrales de los años setenta del siglo pasado, en donde tendremos que empezar, de nuevo a conquistar los derechos y salarios dignos, echándonos a la calle y manifestarnos en las urnas para que estas “crías” de la “cerda”, no tengan tan seguras sus "tetas".