Actualidad - José Campanario - "La palanca"





Dicen que una imagen vale más que mil palabras.

Se necesita un poco de suerte para que la vean los políticos de este país, que falta nos está haciendo. A nosotros para que seamos conscientes de nuestra fuerza y a ellos para que les quede claro de quién dependen.


A ver si de una vez somos conscientes, los ciudadanos, de que los personajes más importantes de nuestro país, de nuestra democracia y de nuestra sociedad somos los ciudadanos. Sí, los simples ciudadanos de a pié; tú que te levantas a las 6 de la mañana para ir al trabajo, tú que tienes que encerrarte en un aula con 40 niños a ver si eres capaz de enseñarles a ser personas, tú que tienes que aguantar el capricho del cliente cuando acude a comprar un trozo de tela para hacer una cortina, tú que, con la crisis, no hay forma de que encuentres trabajo… Eres tú, realmente el importante. Ese personaje, al que entrevistan todos los periodistas, ese Ministro, el Presidente o el mas famoso de turno está ahí gracias a tu voto y a que pagas los impuestos. Su puesto, su choche, su vivienda pagada, su escolta y su nómina dependen de ti.

Por eso, el personaje realmente importante eres tú.

Lo que pasa es que los políticos han cambiado las cosas, han invertido los papeles. Los ciudadanos para la clase política hemos sido reducidos a votantes. De ahí la máxima “cada ciudadano un voto” como supuesto ideario democrático. Los ciudadanos somos para los dirigentes políticos sujetos de obligaciones fiscales. Incómodos entes que en muchas ocasiones originan gastos en sanidad, en asistencia social, en educación, en cultura, etc. Por eso, cuando las cosas pintan mal y la bicha de la crisis aparece, se recortan estos “derechos” de los ciudadanos. Nunca se recortan las ventajas de la casta política. Y es que los derechos que tenemos los ciudadanos son derechos “otorgados” en tanto que los políticos tienen derechos “Per se”. Es la diferencia entre pertenecer a una clase o a otra.

Por eso, a ver si tomamos conciencia de nuestra fuerza y le damos un cambiazo a todo esto que ya va siendo hora.

Parecía que el movimiento del 15 M iba en esa dirección, pero se ha quedado tan sólo en toma de contacto de la conciencia colectiva. Es más, han aparecido elementos que han desvirtuado el sentir y el pensamiento que alentó aquel movimiento. Es preciso retomar las fuerzas, utilizar las nuevas tecnologías (Foros, SMS, correos electrónicos…) para organizarnos. Tan sólo organizándonos podremos elaborar una auténtica alternativa a los caducos, envejecidos y anquilosados partidos políticos que sufrimos en la actualidad.

¡A la tarea que nos queda mucho por hacer y mucho más por conseguir!.




© "Los niños de Juan Manuel" - Junio 2009"